Tegucigalpa (Especial Proceso Digital) – Considerado un país peligroso para los defensores de los derechos humanos y denunciado por múltiples violaciones, el gobierno de la presidenta Xiomara Castro, ha retomado la agenda humanitaria con claros mensajes expresados en su discurso: la defensa de la vida, de los recursos naturales y la recuperación de un Estado garantista de derechos.